Producto peruano post mundial
Un buen mundial no
basta para que el jugador peruano sea vendido a las mejores ligas del mundo. Si
ayuda, pero no es suficiente. El proceso de selección siempre prioriza a futbolistas
argentinos, brasileños, uruguayos, colombianos y hasta chilenos, a pesar de que
esos últimos no asistieron a la ultima Copa del Mundo. Todo gira en torno a un
valor de mercado que se gana a través del tiempo y no de una aceptable
participación mundialista.
Todos reniegan que el
mejor futbolista peruano en Rusia, André Carrillo, se haya ido a la liga árabe
para jugar por el Al Hilal. Todos querían verlo en la Premier, jugando con el
Everton o Fulham al menos, no en una desconocida liga. Incluso, preferían verlo
peleando un puesto en el Benfica, club dueño de su pase. Todo menos verlo
paseando su futbol en tierras que no están a la altura de las grandes ligas.
Nadie toma en
consideración que tal vez ninguna oferta importante llego a manos del Benfica.
Que en el club portugués no iba a jugar o que el mismo jugador quiso asegurar
su futuro rápidamente. Hay que tomar en cuenta que se va un año a préstamo. No
es una venta definitiva. Las posibilidades de regresar a Europa siempre están
latentes.
Tener una destacada
actuación en un mundial no te asegura fichar por un grande de Europa. Esos
equipos por lo general le hacen seguimiento a una determinada lista de
jugadores durante varios meses. El mundial de futbol solo fortalece ese
seguimiento. No suelen contratar jugadores por 2 o 3 partidos buenos. Menos si
no son comunitarios.
En los últimos meses el
mercado mexicano se abrió bastante para los jugadores peruanos. Hoy la MLS
también se esta nutriendo de jugadores nacionales. No se necesitó jugar un
mundial para conseguir establecernos en ese mercado. El valor de mercado aun es
bajo pero esa relación costo-rendimiento hace que se mire con mayor interés
hacia el mercado peruano. Mas no asegura fichar por equipos top.
Ramos también se fue a
Arabia. En su caso nadie levanto la voz. Pasos intrascendentes por Argentina,
Ecuador y México no hacen más que confirmar que es un jugador hecho para la
selección. Irse al medio oriente es importantísimo para asegurar el futuro de
su familia. No es joven, lo sabe él, lo saben todos. El futbol como profesión
es corta y a estas alturas del calendario no viene mal hacer caja en ligas de
menor relieve.
Hoy solo dos peruanos
tienen presencia en 2 de las ligas top de Europa: Luis Advíncula en el Rayo
Vallecano de España y Claudio Pizarro en el Werder Bremen alemán. El primero,
mundialista, está yendo a un equipo recién ascendido y a préstamo. Ni un gran
mundial permitió que compren su pase. El segundo ya tiene un nombre ganado en
la Bundesliga. No necesitó jugar un mundial ni tener 25 años para ser parte de
la elite del futbol mundial.
Se abren mercados
nuevos para los futbolistas peruanos. En su momento fue Grecia, luego vinieron
Polonia, Bélgica y Portugal. Hoy es Arabia Saudita y no hay porque avergonzarse
ni mucho menos. Si tanto nos quejamos de los jugadores que regresan al torneo
local, no veamos mal que al menos sigan jugando en ligas que no pueden ser
peores que nuestro muy mal organizado torneo local.
Ni en nuestra mejor
época tuvimos jugadores en equipos top, de ligas top. Cubillas jugó en el FC
Porto, Cueto en Colombia, por citar a dos de los mas importantes. Solo Benítez
en el Milán de hace mas de 40 años y el Cholo Sotil en el Barcelona de los 70s,
acompañan al Pizarro del Bayern como los peruanos que alcanzaron la cumbre en
clubes importantes del mundo, siendo el bombardero el más exitoso de todos los
tiempos.
Si bien es cierto que
lo ideal en la era post mundial era ver mas futbolistas peruanos en mejores
ligas, aun falta consolidar esas participaciones de forma mas seguida para que
el jugador se valorice mas y lo miren como garantía de éxito. Que se le vea más
como una inversión que como un gasto. Hay calidad y hay material. Gareca convenció
al jugador peruano de que era posible competir a un nivel alto. Solo falta que los
grandes clubes lo hagan.
Comentarios
Publicar un comentario