Lo mismo de siempre
Lamentablemente otra vez la prensa comienza a convertirse en el verdugo del futbolista peruano. Unas veces con razón y otras con saña y mala leche. De esta última, está abusando mucho ultimamente. Hacer leña del árbol caído parece ser la consigna de ciertos medios de prensa que, amparados en una busqueda incesante por ganar rating a como de lugar, escarban la noticia, llegando a veces a exagerarla o, peor aún, a crearla.
Es verdad que el mismo futbolista aporta con sus inconductas, sus irresponsabilidades, etc, pero es también poco profesional tratar de buscar el ángulo más polémico de la noticia haciendo acusasciones sin muchas pruebas que sean de real valía. Un testimonio no puede tomarse como una prueba contundente. Tiene que haber algo que avale ese testimonio, ya sea una foto, un video o alguna otra prueba que puede calificarse como objetiva. Jalarle la lengua al entrevistado constituye una prueba de que el periodista está manejando la investigación a su antojo.
Lo que pasó en el Golf los Inkas simplemente fue el inicio de una persecución sin tregua a los futbolistas. Justificada en ese caso porque se dió en pleno proceso eliminatorio y en la concentración previo a un partido importante. Todo inconducta-sea de la magnitud de esta o de la de Panama-merece un castigo definitivamente. Lo que si no me parece válido es que se persiga a los jugadores-inclusive en su tiempo libre- para encontrarles algo que los perjudique profesional y personalmente.
Markarián actuó como debia. Hizo la investigación, confirmó los casos dados y sancionó. Punto, la cosa debió acabar ahí. Incluso se mencionaron nombres como los de Guizazola que no tenían nada que ver pero, bajo el argumento del " dicen que", se le involucró innecesariamente. Pero no, algunos medios buscan su bien personal queriendo, como sea, involucrar a más gente. Para ello recurren a testimonios que bien pudiesen haber sido dirigidos por los mismos reporteros. Incluso la foto que inició el escandalo es una foto que no permite ver absolutamente nada.
Parece que la meta es eliminar a cuanto jugador se pueda, para poder tener un par de puntitos más de rating. Nadie discute que los futbolistas peruanos-no todos pero si un gran número- son poco profesionales y poco apegados a la disciplina, pero eso no da derecho a ciertos medios a buscarle cinco pies al gato. A buscar la manera de joder más gente a como de lugar. Si están buscando reconocimiento se equivocan. Al final van a conseguir el repudio popular.
Los castigos se dan inmediatamente después de realizada la inconducta. Si se dan las pruebas que demuestren a otros 3 jugadores involucrados( aunque uno no sería jugador sino representante de jugadores, lo cual habla de una patinada más del reportero)entonces que se les aplique el castigo respectivo y a pasar la pagina. Pero hacer todo un show es simplemente un capricho periodistico que busca notoriedad mediática.
Cuando llegó Markarián lo primero que dijo es que necesitaba del apoyo de todos para poder luchar por el objetivo del mundial. Parece que varios no lo entendieron o no lo quisieron entender. O simplemente, les entró por una oreja y les salió por la otra.
Jugadores irresponsables y prensa mala leche= otro mundial al cual no vamos a ir.
Es verdad que el mismo futbolista aporta con sus inconductas, sus irresponsabilidades, etc, pero es también poco profesional tratar de buscar el ángulo más polémico de la noticia haciendo acusasciones sin muchas pruebas que sean de real valía. Un testimonio no puede tomarse como una prueba contundente. Tiene que haber algo que avale ese testimonio, ya sea una foto, un video o alguna otra prueba que puede calificarse como objetiva. Jalarle la lengua al entrevistado constituye una prueba de que el periodista está manejando la investigación a su antojo.
Lo que pasó en el Golf los Inkas simplemente fue el inicio de una persecución sin tregua a los futbolistas. Justificada en ese caso porque se dió en pleno proceso eliminatorio y en la concentración previo a un partido importante. Todo inconducta-sea de la magnitud de esta o de la de Panama-merece un castigo definitivamente. Lo que si no me parece válido es que se persiga a los jugadores-inclusive en su tiempo libre- para encontrarles algo que los perjudique profesional y personalmente.
Markarián actuó como debia. Hizo la investigación, confirmó los casos dados y sancionó. Punto, la cosa debió acabar ahí. Incluso se mencionaron nombres como los de Guizazola que no tenían nada que ver pero, bajo el argumento del " dicen que", se le involucró innecesariamente. Pero no, algunos medios buscan su bien personal queriendo, como sea, involucrar a más gente. Para ello recurren a testimonios que bien pudiesen haber sido dirigidos por los mismos reporteros. Incluso la foto que inició el escandalo es una foto que no permite ver absolutamente nada.
Parece que la meta es eliminar a cuanto jugador se pueda, para poder tener un par de puntitos más de rating. Nadie discute que los futbolistas peruanos-no todos pero si un gran número- son poco profesionales y poco apegados a la disciplina, pero eso no da derecho a ciertos medios a buscarle cinco pies al gato. A buscar la manera de joder más gente a como de lugar. Si están buscando reconocimiento se equivocan. Al final van a conseguir el repudio popular.
Los castigos se dan inmediatamente después de realizada la inconducta. Si se dan las pruebas que demuestren a otros 3 jugadores involucrados( aunque uno no sería jugador sino representante de jugadores, lo cual habla de una patinada más del reportero)entonces que se les aplique el castigo respectivo y a pasar la pagina. Pero hacer todo un show es simplemente un capricho periodistico que busca notoriedad mediática.
Cuando llegó Markarián lo primero que dijo es que necesitaba del apoyo de todos para poder luchar por el objetivo del mundial. Parece que varios no lo entendieron o no lo quisieron entender. O simplemente, les entró por una oreja y les salió por la otra.
Jugadores irresponsables y prensa mala leche= otro mundial al cual no vamos a ir.
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