Copa Libertadores 2012

La fase de grupos arrancó con todo y con resultados acorde a lo que se esperaba por parte de los equipos peruanos. Siempre los partidos de visita son complicados y, por ende, nos cuesta más jugarlos porque no tenemos la capacidad de ir en contra de la adversidad. Carecemos de capacidad de reacción ante lo malo, no poseemos la mentalidad para poder ir en contra de las estadisticas y nos tiemblan las piernas cuando jugamos ante rivales teóricamente superiores. Nos sabemos perdedores antes de jugar los partidos.

Empezando por el Huancayo y su poca capacidad animica y futbolistica para poder sortear una primera etapa y llegando al Aurich y Alianza mostrando una débilidad-especialmente el conjunto intimo-defensiva que augura un final precipitado para los equipos peruanos. La imagen dada en esta primera semana de grupos es mala. Asi de simple. Tal vez lo del conjunto chiclayano sea más loable por el hecho de no ser pasado por encima, de jugar con 10 desde el minuo 36 del ptrimer tiempo( cortesia del irresponsable Cesar Ortiz) y porque pudo, incluso, haber empatado el partido en inferioridad de condiciones.

Alianza Lima comenzó ganando y se dio por bien servido. Craso error. Cuando se juega de visitante hay que aprovechar todas las oportunidades de gol, liquidar el partido si es posible y nunca defender una ventaja minima. Si de por si defender un empate es garantia de perder un partido, la posibilidad de arrancar ganando te da una posibilidad importante de jugar con la ansiedad del rival. Pero para ello necesitas de un lider dentro y fuera del campo que te permite manejar los tiempos. Alianza no tuvo uno en el campo y, definitivamente, no tiene uno afuera del mismo. Pepe Soto no es el técnico indicado si se quiere aspirar a cosas importantes en este evento.

Ganar de visitante no es imposible. Dificil es, pero no imposible. La misión del Aurich era mucho más complicada que la de Alianza. Enfrentar al Inter de Porto Alegre es otra cosa que hacerlo frente a Libertad. Personalmente pienso que jugar en Paraguay no es nada del otro mundo en cuanto a la presión del público. Es algo así como jugar en Lima. Si a eso le agregas que comienzas ganando, es realmente penoso que un equipo termine goleado. Veo ganar al Nacional en Brasil, a Velez en Uruguay, empatar al Bolivar en Chile y me convenzo de que es un tema de actitud sumado a la aptitud.

No hay regularidad, no hay trabajo a largo plazo, no hay capacidad de gestión. Las buenas actuaciones son ciclicas, son producto de un champazo del momento y no de una buena planificación. Se contrata mucho y mal. No son refuerzos, son incorporaciones que no aportan absolutamente nada a potenciar el equipo. El caso de Meneses es una perla más de la gestión Alarcón. Un sujeto que le gusta hacerse la victima cada vez que sale en los medios pero que no asume irresponsabilidades. Todo lo contrario al Aurich, cuyo resultado es puramente producto de un juego deportivo, no es consecuencia de una mala gestion.

Veremos que ocurre en la siguiente semana. Aurich juega con The Strongest en La Paz. A pesar de haberle ganado al Santos, el elenco del altiplano es bastante ganable. A Alainza le toca lo más complicado que es ir a Rio y jugar con un Vasco que tiene la necesidad de ganar. Dentro de todo lo malo hay que resaltar el hecho de que ninguno de los cuadros peruanos ha debutado como local, lo cual les deja un fixture más generoso. Sin embargo sería importante que roben puntos en sus proximas visitas.

La Libertadores hay que jugarla con intensidad e inteligencia. No es lo mismo que jugar el descentralizado-aparte de la diferencia abismal entre los protagonistas de una y otra competición-que un torneo internacional. Los rivales son más calificados y los defectos de nuestros jugadores se detectan con mayor precisión.

Ojalá que veamos versiones de aquellos equipos que dejaron una buena impresión en la libertadores de hace un par de años. No son los mismos jugadores pero si las mismas camisetas. Si se encuentra la misma actitud, los resultados podrán ser esperanzadores.