La importancia del agente en el futbol

En el futbol actual, el talento y la disciplina hacen que un jugador llegue lejos en su profesión. Son la base para que un futbolista pueda aspirar a jugar en los mejores equipos del mundo y tentar un futuro económico importante. A ello hay que añadirle la importancia de tener un representante, o agente según como uno quiera llamarlo, cuya principal labor será la de conseguirle al jugador el contrato que le beneficie tanto a nivel económico o deportivo.

Hoy en día, los agentes son un mal necesario. Un mal porque muchos-no todos-se aprovechan y sacan una tajada importante en compra-venta, no siendo muy clara la transacción, aunque al final por lo que gana el jugador muchas veces este no se da cuenta. Aun así, logran colocar a sus representados en mercados que a corto plazo les van a representar ingresos importantes a nivel económico.

Se prioriza demasiado lo económico., No está mal, es válido. El futbol es una profesión, y corta demás. No obstante, muchas carreras necesitan levantar vuelo en ligas competitivas y lo económico va de la mano con el perfil que se requiere para llevarla de manera exitosa. Irse de frente a Qatar, China o Arabia te aseguran la vida pero a nivel deportivo es un estancamiento evidente,

El agente debe saber balancear ambas cuestiones a la hora de recibir una oferta o de ofrecer al jugador, sea cual fuese el caso. Muchos jugadores ceden, muchas veces, su poder de decisión a la hora de aceptar el lugar al cual van a ir a jugar. En el medio local tenemos varios casos de jugadores que pudieron llegar lejos gracias a un buen representante y otros que no gracias a uno malo.

Es necesario que el representante sea una persona de confianza. En muchos casos es familiar del jugador, lo cual le asegura mayor tranquilidad al jugador. Si no lo es, lo ideal es que sea un profesional de prestigio comprobado. No es fácil dejar que una persona ajena a  uno maneje sus intereses económicos pero es necesario para poder aspirar a tener una carrera importante en el rubro.

El plan de carrera de un futbolista debe comenzar con lo meramente deportivo. Mientras más destaque, las posibilidades de incrementar su cotización irán en aumento. No es lo mismo tener 20 e ir a jugar a Arabia, que tener 35. A los 35 ya uno piensa más en lo económico y es más rentable irse a un medio menos competitivo. La transición de un jugador peruano debe apuntar a Europa vía una liga Sudamérica top, que puede ser Argentina o Brasil.

No es fácil, para esos están los asesores quienes van a manejar la carrera del profesional. Intentar hacerlo solo puede que funcione pero las posibilidades de llegar al futbol de elite serán más escasas. Hoy, sin contactos todo es más difícil. El agente tiene contactos a través de otros agentes o clubes, lo cual le da posibilidad de ofrecer a un determinado jugador con mayor facilidad. Obviamente, comisión mediante.